Fecha: 18-08-2018
Lugar: Movistar Arena
Productora:
Fotógrafo: Ramón eMe Gómez 
@don.eme
Periodista: Diego Puebla @Diego.puebla.h
La cantante italiana repletó Movistar Arena con un repaso por sus 25 años de historia
Oriunda de Faenza, una ciudad en el norte de la provincia de Rávena, ubicada en la región de Emilia-Romaña en Italia. Laura Pausini creció en Solarolo una ciudad campesina donde se desarrolló teniendo una modesta vida antes de alcanzar el éxito. Hija de maestra y de una infancia acompañada de prados y el calor de hogar, comenzó su carrera artística junto a su padre Fabrizio hasta que en el 93’ logró el primer lugar con “La Solitudine” (La Soledad en español) en el importantísimo Festival de San Remo, situación que impulsó su trabajo en Italia y la reforzó para lo que venía en el futuro en otras latitudes.
25 años después, Pausini de 44 años es la cantautora pop italiana más exitosa y mediática a nivel mundial. Conocida en todo el orbe, sus canciones han traspasado idiomas como al español, portugués, inglés, francés, catalán e incluso al latín. Superando los 70 millones de discos vendidos, ganadora de múltiples premios como la primera italiana en ganar un Premio Grammy, además de su versión latina por sus álbumes “Escucha en 2005” y “Yo canto” en 2007, es considerada incluso por “The Sun” dentro de la categoría de las cantantes que “jamás serán olvidadas”, todas estas categorías sorprendentes la convierten una megaestrella que pisó nuestro país nuevamente.
Con un público consciente de la tremenda artista que nuevamente llegaría a Chile, las entradas estaban agotadas días antes de la función pactada para el pasado 18 de agosto. La fría noche de invierno quedó atrás dentro del Movistar Arena, cada rincón esperaba a la cantante que celebraba 25 años de historia y su nueva vida como madre de Paola, un vuelco en su vida como sostiene en diversas entrevistas.
La noche que tomaba forma con el público haciendo la ola en todos los sectores del recinto, e incluso con el iluminador cómplice de los asistentes que jugaba con el panel lumínico haciendo la previa del espectáculo, se detuvo cuando las luces desaparecieron por completo. Junto a sus músicos y coristas impecablemente vestidos de rosado- músicos que incluye a su conyugue Paolo- para comenzar de inmediato el set de canciones con “Nadie ha dicho” y Pausini dejando su habilidad vocal rápidamente en el primer tema.
“Inolvidable”, “El lado derecho del corazón”, “Se Fue” y la mencionada “La Soledad” fueron incluidas en un larguísimo show que cada alma fanática de la artista agradeció con 24 canciones puestas en su mayoría en español. El show dedicado a “Renato”, fanático seguidor de la cantante fallecido hace pocos días fue el momento emotivo entregado por la intensa intérprete que en cada momento agradecía a su amado Chile y demostraba alegría por estar en un territorio que ella amaba.
Después de cada tema los vítores al estilo partido de fútbol se sentían en todo el sector, con una ejecución impecable, una voz tenue a ratos para pasar a enfervorecidas líneas melódicas fueron algunos de los pasajes donde la voz soprano lírica se lucía para demostrar su chapa de mega-estrella. Con canciones versionadas más apegadas a sus composiciones originales esta vez, demostración de nuevos temas y la emotividad que nos tiene acostumbrados, Laura Pausini supo nuevamente conquistar a 12.000 personas que lograron una gran muestra del repertorio más conocido de la mujer que sigue sorprendiendo y reinventándose desde su carrera como cantante, hasta su aspecto personal como madre. Tomando el dicho italiano por lo demostrado solo queda decir… ¡Mamma mía!
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