Fecha: 28-09-2018
Lugar: Pista Atlética Estadio Nacional
Productora: T4F+Bizarro
Fotógrafo: Ramón eMe Gómez
Periodista: Diego Puebla
El guatemalteco regresó a Chile para despedir su gira “Circo Soledad” una Pista Atlética repleta.
El multi-ventas, Ricardo Arjona, es parte de la historia musical latinoamericana. En sus últimos registros en el pasado mes de noviembre de 2017, el artista sumó cinco fechas en Movistar Arena llenando cada noche con el debut de “Circo Soledad”, último disco nominado a los Billboard en el año de su lanzamiento como la placa del año.
Grabada en Nashville, Guatemala, Londres, Miami, Nueva York, Colombia y más, donde 14 temas instauraron el regreso musical del intérprete a las giras mundiales. Debido al éxito del tour, en 2018 repitió la fórmula para realizar “Circo Soledad La Despedida” con motivo de un nuevo encuentro con sus fieles seguidores y seguidoras que no lograron repletar el Estadio Nacional como estaba agendado, pero se mudó el evento a unos metros de distancia a la Pista Atlética. Nuevamente llenó el recinto a pocos minutos de que comenzara una nueva presentación de Édgar Ricardo Arjona Morales.
Al igual que su presentación del año pasado, un arlequín abría el show para jugar con el público que en esta versión no logró encender a un público algo alterado por la pronta aparición de Arjona. Luego de un video introductorio, “Ella”, “El Problema” y “Tarde” fueron parte del comienzo que desde las alturas y con los gritos de un público en un 80% femenino, cayó rendida de inmediato ante el músico de 54 años que con pelo corto y algo más delgado, pero con igual calidad vocal e interpretativa, jugó de local ante el público chileno.
Anécdotas de su paso por el Festival de Viña del Mar, como cuando fue por primera vez y ante el susto por la pifiadera se asustó demasiado cuando el público comenzó a cantar la clásica: “Mijito rico, mijito rico…”. Hasta que después de dio cuenta de lo que era, desatando las risas del público.
En lo musical, con una banda excepcional. Impecables coristas, además de guitarristas son un soporte perfecto ante un setlist de horas que puede presentar el cantante, ante el fanatismo y el conocimiento por Ricardo Arjona en el inconsciente colectivo local.
La “Historia de Taxi” en versión salsa, “Como duele”, “Señora de las cuatro décadas” sumando a una cuarentona al escenario, “Te conozco” y los múltiples clásicos sumaron treinta canciones en un show completo para cualquier seguidor. Un artista que genera anticuerpos en diversos públicos, pero que sigue cultivando su fanaticada en una clara estrategia que lo sigue beneficiando al venir y repletar escenarios, sumado a la especie de culto que sumó en casi 34 años de carrera y con 80 millones de discos a su haber, es sin lugar a dudas un eslabón importante en el pop y las baladas que con amor u odio que le puedan tener, mantiene un espectáculo de calidad y una gran cantidad de seguidoras que lo acompañarán venga todos los años si así lo decide.
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