Travis Scott en Chile: intensidad escénica y euforia juvenil

Por Catalina Ruiz Ravello

Desde el anuncio acerca el retorno de Travis Scott a nuestro país, las expectativas sobre lo que podría realizar el rapero eran altas, considerando la locura provocada en otros lugares del mundo con su gira “Circus Maximus” y las positivas críticas que ha recibido su más reciente trabajo de estudio, “Utopia”.

 

Tras poco más de 20 minutos de retraso se inició el show, programado para las 21:00 horas y que contó con la presencia del nacional Pablo Chill-E como telonero, ante un Estadio Bicentenario La Florida rebosante una juvenil fanaticada.

 

En cuanto comenzó a escucharse la introducción del disco “Utopia”, una avalancha de eufóricos gritos se dejó caer desde todos los rincones del recinto capitalino, los que se intensificaron aún más al aparecer el estadounidense sobre un un escenario que permitía una experiencia en 360°.

 

La tarima también incluía montañas, una pantalla gigante en el espacio donde habitualmente se ubican los artistas que tocan en el Bicentenario del La Florida, y plataformas a diversos niveles de altura. De allí también salieron durante toda la noche múltiples efectos como pirotecnia, humo y fuego.

 

“HYANE”, “THANK GOD” y “MODERM JAM”, fueron las primeras en sonar, dando el puntapié inicial a una noche que no sólo contó con la presencia de los fanáticos de Scott, sino también de diversos rostros del ambiente urbano chileno, tal es el caso de Marcianeke y Cris MJ, con quien incluso se reunió en el estudio para trabajar en una colaboración. Posteriormente, se dio espacio a “Aye”, una de las tantas interpretaciones que posee el estadounidense con otros artistas, en este caso, con Lil Uzi Vert.

 

Uno de los momentos más emocionantes y más cercanos entre el rapero y los asistentes se dio a continuación. Para la interpretación de “sdp interlude”, cuatro eufóricas personas subieron al escenario a dar lo mejor de sí para impresionar a su ídolo con su “rage”. Sin embargo, este momento no estuvo exento de inconvenientes, ya que uno de los afortunados casi se pierde la oportunidad al intentar sacarse una fotografía estilo selfie con Scott, quien le pidió que abandonara la tarima, aunque -afortunadamente para el fanático- le permitieron regresar si entregaba su celular a un encargado de seguridad. 

 

Luego, casi 13 canciones, dentro de las que estuvieron “Mo City Flexologist”, la colaboración con Palyboi Carti, “BACKR00MS”, “SIRENS”, “Praise God” de Kanye West, “Mamacita”; y “CIRCUS MAXIMUS”; fueron interpretadas por Scott sin descanso alguno, desatando aún más el ánimo de euforia entre las miles de personas presentes,

 

Un breve descanso, previo a “Drugs You Should Try It”, permitió un respiro de toda la locura desatada hasta ese instante, la que incluso estuvo marcada por varios desmayos, fans golpeados y personas saliendo prácticamente desmayadas de las primeras filas. 

 

Tras la primera mitad del espectáculo, de quien también es llamado “The Flame”, las siguientes canciones en causar un estruendo en la comuna de La Florida fueron: “I Know?”, “90210”, “MELTDOWN”, “TOPIA TWINS” y “NO BYSTANDERS”.

 

Luego llegó otro gran momento ocurrió en el escenario, dado que Scott cantó no sólo una vez, su éxito “FE!N”, sino que la repitió nada más y nada menos que en cinco veces, reafirmando por qué es merecedora de las más de 850 millones de reproducciones que posee en Spotify. 

 

A medida que transcurrían los minutos y se acercaba el fin, las miles de personas que llegaron a repletar el Estadio Bicentenario de La Florida, mantuvieron el ánimo en alto, aportando un toque especial a un show que no sólo reivindicó a Scott con Chile -tomando en cuenta que en su visita de 2022 su setlist fue bastante breve- sino que también demostró el poderío de su popularidad en Chile.

 

“SICKO MODE”, “Antidote”, “goosebumps” y “TELEKINESIS”, cerraron una jornada cargada de euforia juvenil, la que también estuvo motivada por una extraordinaria puesta en escena del rapero estadounidense, quien no sólo aprovechó de los clásicos extras como la pirotecnia y la pantalla gigante, sino también los espacios construidos para resaltar lo que es indudablemente su tremenda presencia escénica. 

 

Sin embargo, a modo de transparentar hay que mencionar que sí existió un punto bajo en la noche estelar de Travis Scott en Chile, a raíz de la desorganización que afectó a los medios de prensa acreditados, en especial a los fotógrafos y camarógrafos, quienes tuvieron que dejar sus equipos de lado sin poder captar material, a raíz del cambio de parecer de último momento del equipo del estadounidense.