Fecha: 11 de agosto de 2017
Lugar: Teatro Teletón
Productora: Macondo Konzerte
Fotógrafo: Kena Luppichini
Periodista: Juan Guillermo Carrasco
Desde que se alzaron como la banda rock de Chile gracias a los Premios PULSAR y Escuchar (ambos del presente año), los de Curicó supieron que el excelente momento que vive el sexteto no es más que la causa y efecto de su perseverancia por un arriesgado proyecto de raíz chilena.
Han sido años de búsqueda y ensayo dilucidando las mejores vías de representatividad por el sonido criollo para las masas. Es así que como actuales monarcas del rock chileno agotaron un Teatro Teletón entregado en total conexión.
Bajo este aspecto todo calzó: Chile como plaza de conciertos, la valorización de la escena independiente y el despertar del público por nuestro circuito, validan a una banda que crece junto con su gente. Puntuales a los afiches de promoción, el repaso de su disco madre («Porvenir», 2009) se recuerda con cariño y cierra el primer cuarto de un show que no se guardó nada. Luego, las dedicaciones a quienes dieron origen a la historia de Kuervos fueron homenajeados en pistas como ‘Campesino’ y el resto de sus obras.
Pasada la primera media hora, la fiesta fue cada vez en aumento. Luego, el turno correspondió a «El Vuelo del Pillán», esfuerzo que descentralizó la música chilena dando sorpresa ante el sesgo mediático por los consagrados. Es así que ‘Enredadera’, ‘Cenizas’, ‘Canto de las estrellas’ (recordando a Víctor Jara junto a José Seves de Inti-Illimani), la potente versión de ‘Los Cometas’, entre otras, nos llevó a un viaje de punta a cabo por todas las referencias musicales de la nación entre boleros, metal, trotes, creaciones ceremoniales y la amplia paleta de estilos que Chile posee en su catálogo donde Kuervos son embajadores de aquello.
Riqueza que debemos apreciar con sus colores y notas a nuestras próximas generaciones. Quizá de las presentaciones más notables de su legado.
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