Tomasa del Real en Lollapalooza: «El mainstream está preparado para el neoperreo»


El género urbano nacional tuvo muchos exponentes durante las dos primeras jornadas de Lollapalooza, siendo Tomasa del Real una de las exponentes de más larga trayectoria dentro del género.

Después de su presentación, donde congregó una gran cantidad de público en el Lotus Stage, la iquiqueña conversó con Agenda Musical sobre lo que será su presentación en el festival norteamericano Coachella, su definición del neoperreo y los próximos pasos de su carrera.

Agenda Musical: En un par de semanas más estarás presentándote en Coachella, ¿cómo ha sido la preparación para esos shows?

Tomasa del Real: En general, vengo haciendo lo mismo que hago siempre, que es cantar la mayoría de mis canciones e invitar a todos los artistas que estén cerca. También el poder dejar a la luz lo que es la escena del underground o lo que es el neoperreo en este caso. Es como preparar lo que voy a mostrar, así voy inventando. Siempre es diferente.

AM: ¿Cómo enfrentaste esta presentación en Lollapalooza? ¿Fue un tipo de calentamiento?

TdR: Primero feliz, porque es un festival grande y en mi país. Encuentro bacán que aprecien lo que estamos haciendo afuera, que vean que estoy ahí haciendo cositas. Por esa parte es muy bacán. Además, este año he intentado solo tocar en festivales y en eventos que hacemos nosotros mismos de neoperreo, pero en general en festivales porque me interesa mucho dejar de estar en el underground y que esa escena sea tan selecta, con un público tan selecto, ya que siento que le mainstream está preparado para esto. Es un buen momento para empezar a mostrarlo y los festivales son una catapulta para las nuevas tendencias. Si un público masivo puede entender algo nuevo, es un primer paso… y grande.

AM: Tu eres parte de esto que llamas neoperreo, ¿cuál es la diferencia con el perreo “tradicional”?

TdR: El neoperreo, como palabra, salió porque yo empecé a explicar lo que estaba haciendo. Es decir, música inspirada en el reggaetón, pero que no sonaba como reggaetón. Entonces, por definir lo que estaba haciendo, dije ‘bueno, no sé si esto es reggaetón, pero es perreo, sí o sí’. Y no es cualquier perreo, sino que es una nueva forma de hacerlo, una manera deconstruida de hacer perreo.

Esto viene en conjunto con la era digital y las herramientas digitales para hacer arte. A mí me pasó que en el momento en el que me llegó un iPhone a la mano, o que me llegó un MacBook, empecé a explorar estos programas y estas maneras de entretener, que son diferentes a lo que había antes. Entonces, la influencia del reggaetón en muchas personas que nos violaron con esa música, como que nos violó la “Gasolina” la mente, está ahí.

Entonces, al recibir estas herramientas digitales al mismo tiempo globalmente –y no solo yo en Iquique, sino que también en España, Uruguay, Argentina o Europa-  al mismo tiempo, la gente agarró estas herramientas y empezó a hacer perreo, por la influencia del reggaetón. Pero, totalmente inventado desde cero, desde el do it yourself. Eso creó una nueva subcultura, que tenía de la mano a ciertas personas, ciertos países, ciertos lenguajes, tatuajes, sonidos más digitales… es una subcultura. Se refleja como lo fue el rock and roll en su momento, en donde existía como masa general, y después apareció el rockabilly como una subcultura donde tenían sus propios peinados, tatuajes, sonidos… todo, súper específico. Es lo mismo, pero de una manera más moderna. Esa subcultura, ese lado B, contiene mujeres, pero no solo eso, sino que diversidad en general. Está cualquier persona a la que se le ocurrió hacer música, nadie se fijó con qué genitales nació. Todos tuvimos internet por igual, eso nos dio una libertad y una equidad musical. Eso se transformó en el neoperreo, con todas las personas que se metieron en eso.

AM: Una de tus canciones fue destacada por la revista Rolling Stone como una de las mejores el 2018, ¿cómo sentiste ese reconocimiento?

TdR: Para mí es súper bacán que digan cosas buenas de mí, eso es algo que me va a servir siempre, en especial si es un medio como Rolling Stone. Ellos no se están fijando en la popularidad, sino que en el contenido y el impacto del proyecto. Para mí es una bendición.

AM: ¿Cuál fue la mayor dificultad que has encontrado en tu carrera?

TdR: Lidiar con el tiempo que hay que invertir en una carrera, con el trasnoche y la sobre exigencia de energía. Entregas mucha energía y recibes mucha energía. Eso es lo más difícil, el lidiar con toda esa parte.

AM: Además de cantar, también tatúas y diseñas ropa, ¿hay algún área más en el que quieras meterte en el futuro?

TdR: Sí, a mí en general me gustan los negocios. Me gusta hacer negocios y es muy probable que en un periodo no muy largo solo me dedique a eso.

AM: Leí que entre tus metas está el ser millonaria, tener una mansión y también un yate, ¿hay alguna meta aparte de esas que nos puedas contar?

TdR: El poder seguir haciendo lo que hago, sin ninguna presión, solo porque me divierte. Seguir pensando que eso es divertido, te conviene hacer lo que te divierte. Ojalá no tener que ceder ante ninguna presión social ni nada por la música, sino que seguir haciendo lo que hago: sentirme bien delante de un micrófono.

AM: Finalmente, ¿algún mensaje a la gente que te fue a ver al Lotus Stage?

TdR: Les mando un beso, muchas gracias por pertenecer, por apreciar y entender, por ser parte de una generación bacán y no quedarse en el pasado con ideas retrógradas, viendo más allá y disfrutando de lo que somos. Somos una cosa loca, no somos tan normales.


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